¿Eres padre de un chico de bachilleratos en aguascalientes, CDMX, Guadalajara o algún estado de México? Digamos la verdad: ¡son raros los padres que nunca han deseado secreta o abiertamente un prodigio de las matemáticas! Trabajamos con cientos y miles de padres y sabemos que las habilidades matemáticas de nuestros hijos son siempre una prioridad para la mayoría. Esto se debe más bien a la reputación que tienen las matemáticas como asignatura.
Sí, los conocimientos matemáticos o las aplicaciones básicas son vitales para casi todas las profesiones hoy en día. Todas las profesiones tienen una u otra aplicación de las matemáticas, ya sea la moda o la tecnología espacial. Los años de la escuela son el momento en que tu hijo pueda formar una base sólida para las matemáticas.
Estos años son aún más importantes porque si un alumno se aleja de las matemáticas por cualquier motivo o desarrolla ansiedad por las mismas, lo más probable es que acabe teniendo alguna dificultad más adelante.
Haz que conecten las matemáticas con la vida cotidiana
Ser capaz de aplicar las matemáticas a situaciones de la vida real hará que tu hijo las entienda y las aprecie mejor. La percepción de las matemáticas de tu hijo cambiará drásticamente: pasará de ser una asignatura abstracta a ser una asignatura en acción todos los días.
Lleva a tu hijo a una tienda de juegos o a un supermercado donde pueda trabajar con listas de la compra y calcular los costos. Pídales que sumen el precio de todos los productos que han elegido y resten el descuento. No te sorprendas si, después de uno o dos viajes de este tipo, tu hijo vuelve contándote la mejor oferta de descuento en general.
Conseguirle ayuda personalizada
Conseguir que tu hijo tenga un profesor particular de matemáticas es siempre una mejor idea que dejarlo a la suerte. Los años de la escuela son los mejores para construir una base sólida en matemáticas. Un profesor particular puede aportar las ventajas de los conocimientos profesionales, la experiencia de trabajar con niños de edades similares y un sentido de la disciplina y la rutina. En el caso de las matemáticas, es especialmente importante que tu hijo reciba ayuda personalizada en lugar de plantillas de fórmulas.
Utilizar un enfoque SEL
La UNESCO define el SEL o aprendizaje social y emocional como el proceso mediante el cual los adolescentes y los adultos comprenden y gestionan las emociones, establecen y alcanzan objetivos positivos, sienten y muestran empatía por los demás, establecen y mantienen relaciones positivas y toman decisiones responsables.
Ahora bien, te preguntarás cómo puede el aprendizaje social y emocional desempeñar un papel en el aprendizaje de las matemáticas. El objetivo del SEL en la enseñanza de las matemáticas es ayudar a los niños a desarrollar una identidad matemática positiva conectando y aplicando los conceptos matemáticos de diversas maneras. Los juegos matemáticos sencillos de tablero y de cartas pueden ayudar a los niños a aprender sobre patrones, sentido numérico y sentido espacial. Además, también enseñan a respetar los turnos, a jugar limpio y a analizar los errores.
Premia tanto el esfuerzo como el rendimiento
Cree siempre en tu hijo y anímalo a abordar las matemáticas con una mentalidad positiva. Las afirmaciones positivas y los elogios pueden hacer maravillas para aumentar la confianza de tu hijo, sobre todo en matemáticas. Esto se debe a que a menudo los chicos se desmotivan cuando no encuentran las respuestas correctas a un problema. Este efecto se agrava con cada problema que no pueden abordar. Por eso es importante que los premies por el esfuerzo e incluso por equivocarse.
Enseña a tus hijos que cometer errores es una parte esencial del aprendizaje de las matemáticas. Involucra a tu hijo en actividades diarias que impliquen la aplicación de matemáticas sencillas y elógialo por la ayuda. Una simple recompensa como un chocolate o un libro de cuentos por abordar un nuevo problema de matemáticas (incluso si fallan) puede ser una agradable sorpresa. Haz las pequeñas cosas y ve cómo se convierten en una confianza y un amor renovados por las matemáticas para tu hijo.
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